Audición radial
Mujica descree que narcotráfico ya haya “comprado tanto formador de opinión”
El Presidente de la República dedicó su audición radial semanal a tratar el tema del narcotráfico donde se preguntó: “El narcotráfico. ¿ha comprado ya, tanto formador de opinión? No lo puedo creer”, se respondió focalizando aspectos de la forma en que fue planteada la noticia de la legalización de la marihuana y sus consecuencias en nuestro país.
Mujica dijo que en verano se dedicará “con más tiempo” a volcar “en formación para que quienes debieran preocuparse por la suerte del Uruguay, ayuden: hay que apoyar la lucha contra el narcotráfico. Debemos enfrentar al narcotráfico que es la más penosa de las plagas de la historia policial latinoamericana, y se quedan mirando para el costado (…) anotar por un lado que el problema es la seguridad y no se ocupan de darse cuenta de la relación que hay en el problema de la seguridad global, por las consecuencias directas e indirectas del narcotráfico”.
El mandatario recordó en ese sentido y entre otros puntos que el narcotráfico “tiende a corromper los órganos represivos; existe una distorsión en las conductas incluso delictivas que ha traído esta forma de delito, que se desparrama y va mucho más allá del narcotráfico. Un tercio de los presos que tenemos en las cárceles –uno cada tres- es a consecuencia del narcotráfico”, recordó.
El flagelo que irrumpe en los valores de convivencia
Mujica apuntó que “los usos autodefensivos que tiene el tráfico de estupefacientes tienden a desparramarse a otras esferas del delito y está tiñiendo hasta las tradiciones delictivas de nuestra historia”.
Recordó que ello ha pasado ya “en otras partes de América y tiende a irrumpir en todos los valores de convivencia, tiende a corromper los órganos represivos, interfiere en las relaciones políticas de las repúblicas, compra las voluntades de los gurises pobres, con la sensación de un triunfo fácil, del escapismo, y enajena familias enteras, trata de dominar barriadas enteras, tiende a aplicar el fusil como forma de ajuste de cuentas, pudre las relaciones en las cárceles a los carceleros, negocia suculentos apoyos” e incluso alcanzan a condicionar si no eliminar “a los que ocupan puestos claves desde el punto de vista de los órganos represivos”.
Para Mujica “no debería de seguirse cometiendo el error de dejar este mercado abierto al camino del delito” en tanto se trata de “la explotación de una enfermedad (…) Nosotros estamos a leguas de considerar que el consumo de cualquier tipo de estupefaciente tenga algún beneficio, pero en la existencia de la adicción es que el narcotráfico se apropia de ese mercado clandestino”.
Apuntando que “vale la pena la discusión a lo largo y ancho del país: no deberíamos quitarnos la responsabilidad” criticó las políticas represivas llevadas adelante hasta ahora porque “lo único que hacemos con la represión es llenar la cárcel de gente; ¿estaremos tan equivocados?, este flagelo, ¿no debería ser una causa nacional en la forma de enfrentarlo?”.
Destacó que todo pasa por un mercado de altísima rentabilidad capaz de muchas acciones más allá de las vistas aún en el país. “Si no se le arrebata la tasa de ganancia al narcotráfico” nada se logrará. “Alguna gente nos dice que tenemos que propagar que el vicio es malo: chocolate por la noticia. Estamos de acuerdo, pero cuántas cosas malas a pesar de saber que son malas, en tanto somos hombres tercos y débiles, terminamos acompañando, o ¿no sabemos que el cigarro es malo? Horriblemente malo. Y seguimos fumando”, señaló.
En cuanto al narcotráfico marcó la diferencia “porque esto es una enfermedad social que nos mete el delito en un mercado clandestino caro: esto sigue siendo un negocio a pesar de todas las represiones, porque tiene una alta tasa de ganancia. Y si no le quitamos la tasa de ganancia, todas las otras formas de contralor policial, demuestran que no alcanzan”.

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